Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. «¡Vamos a quemar el pino de Navidad si no nos pagan!», externaron pensionados frente a Palacio de Gobierno mientras bloqueaban la calle Juan de la Luz Enríquez, donde denunciaron que les entregaron «cheques falsos».
Las personas de la tercera edad se vieron en la necesidad de manifestarse nuevamente, debido a que el gobierno priista que encabeza Javier Duarte de Ochoa les adeuda la pensión de noviembre, diciembre, el aguinaldo y el bono retroactivo desde enero.
El pasado 10 de diciembre les entregaron cheques con fecha del día 18, mismos que catalogaron como «falsos», toda vez que acudieron a los bancos y les informaron que no había fondos para pagarles.
De acuerdo con Luis Manuel González Paz, uno de los inconformes, el Gobierno estatal ha mostrado ser «insensible» con los adultos mayores que cumplieron más de 30 años al servicio de la educación en Veracruz.
Se trata de profesores, adheridos a la sección 56 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), al Sindicato Unificador de los Trabajadores al Servicio del Estado y el Magisterio (Sutsem) y a otras organizaciones sindicales quienes externaron su inconformidad en las calles de la capital del estado.
«Cada año pasa lo mismo, parecemos limosneros, nos quieren ver de rodillas a todos los viejitos que ya estamos cansados. Aquí vamos a permanecer para que se haga público y que se vea que el maestro a pesar de ser viejo, pero no senil, tiene dignidad, tiene vergüenza y defiende los derechos de los trabajadores», comentó el entrevistado.
Mientras tanto, las personas de la tercera edad que lo rodeaban, gritaban: «Que nos paguen, que nos paguen, que nos paguen».
«Duarte tiene que hablar con el pueblo, no nosotros con él, él tiene compromisos con el pueblo, no nosotros con él, nosotros lo llevamos ahí con el voto», añadió González Paz mientras señalaba el Palacio de Gobierno.
Los inconformes acusaron que las mismas autoridades de gobierno, mandaron ambulancias del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para que circularan sobre Enríquez, en busca de que los protestantes liberaran la arteria y se desestabilizara la manifestación.