El conflicto en Siria se está poniendo más caliente. Después de advertir a Estados Unidos que no volaran sus aviones sobre Siria, los rusos bombardearon la zona de la ciudad de Homs. El gobierno ruso asegura que los ataques estuvieron dirigidos a la zona ocupada por el Estado Islámico; Estados Unidos asegura que la zona bombardeada está ocupada por rebeldes contarios al presidente Bashar al Asad. El secretario de Estado John Kerry declaró que esos ataques no ayudan a que el conflicto se destrabe. Los rusos siguen en su postura de apoyar el régimen de Bashar al Asad. Mientras tanto los ciudadanos sirios siguen abandonando sus comunidades y emigrando a Europa. Al parecer el conflicto va para largo.
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