Junte usted a un cínico, a un prepotente, a un stripper y a un agiotista, y entonces tendrá usted a la camarilla que salvó del juicio político al gobernador de Veracruz. Los legisladores priistas Ciro Félix Porras, Juan Manuel Velázquez Yunes y Marco del Ángel Arroyo, así como Eduardo Sánchez Macías, del Verde, consideraron que la solicitud para el juicio de procedencia era meramente «política y electorera». Ciro Félix Porras es el hijo de la peor alcaldesa que ha tenido Minatitlán, un diputado que sólo se la pasa regalando cajitas de medicina y llevando a las escuelas unas libretitas en lugar de legislar; de Velázquez Yunes recordamos que su hermana lo acusó de robarle la herencia, y que cuando le dijo que lo iba a demandar le contestó con su frase favorita: «Hazle como quieras y como puedas». Marco del Ángel, mejor conocido como “el rey de las trusas de 30 pesos,” hijo de Cesar del Ángel y sus 400 Pueblos, un diputado que se atrevió a encuerarse y enseñar miserias en la vía pública; y finalmente Eduardo Sánchez Macías, empresario periodístico, acusado por sus propios compañeros del Congreso de andar extorsionándolos. Pues estos incólumes diputados, amiguitos del gobernador, seguramente aleccionados por Juan Nicolás Callejas Arroyo, fueron los que evitaron el juicio político a nuestro querido gobernador.
¡Vaya fichitas las que salvaron a Duarte del juicio político!
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