¡Ya están cancelados!

Trabajadores
Los trabajadores de la Secretaría de Salud del Estado de Veracruz (Sesver) se manifestaron la mañana de este lunes para exigir que sean borrados de las listas en las que aparecen en las que supuestamente cobran a través de dos empresas fantasma FOTO: FRANCISCO DE LUNA
- en Opinión

Brenda Caballero / ¡Apanicados!, así me hablaron tres trabajadores de la Secretaría de Salud ante la situación de lo que se ha denominado “nóminas de empresas fantasma de Sesver”. Días anteriores, su sindicato les había mandado un oficio para que verificaran su situación fiscal ya que se había detectado que  varios trabajadores de su delegación presentaban supuestos depósitos de nómina que venía realizando la empresa Binhard Innovation SA de CV.

Para que pudieran hacer la verificación y las denuncias correspondientes, les anexaron también todas las indicaciones aunque a estas alturas los trabajadores involucrados están hartos de todos los trámites que tienen que hacer para denunciar el robo de identidad. “¿Qué culpa tenemos nosotros?

En general, lo que tiene que ver con aspectos contables o fiscales se los dejamos al contador, pero hoy en día es necesario que todos conozcamos nuestro Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y nuestra contraseña (clave designada por nosotros de 8 dígitos) que se tramita en alguna oficina del Servicio de Administración Tributaria (SAT) sin hacer cita previa.

El RFC y la Contraseña serán la llave para accesar a la página del SAT y conocer las facturas que hemos recibido de manera mensual, aunque también nos permitirá consultar las facturas emitidas por nosotros.

Es así como al accesar al portal individual de cada trabajador, éstos se percataron de que a partir del primero abril de este año tenían timbrado un Comprobante Fiscal Digital (CFDI) de la empresa Binhard Innovation SA de CV, por un importe promedio de 2 mil 706 pesos 55 centavos y el tipo de comprobante Egreso, en el cual, al abrir el archivo de extensión xlm adjunto, se puede ver el código postal del lugar de expedición, siendo este 91190, que si lo introducimos en la página micodigopostal.org, aparecerá la Colonia Indeco Ánimas de Xalapa, Ver., como el lugar donde se hizo el timbrado del CFDI. El Método de Pago está “No aplica”, allí debería estipularse si fue en efectivo, por tarjeta, cheque o transferencia. En la forma de pago dice “En una sola exhibición”.

Cabe hacer mención que el pago supuesto era de forma mensual y que en realidad el total de percepciones era por 2 mil 433 pesos con 22 centavos, pagando 30.4 días con un salario diario integrado de 83.66 pesos; es decir, la empresa pagaba el salario mínimo, razón por la que no tenía la obligación de retener el ISR correspondiente al trabajador, al contrario, por el bajo salario le otorga el Subsidio para el Empleo evitando de esta forma hacer declaraciones de Retenciones de ISR al SAT.

El CFDI menciona también que la jornada es de tipo 01, contrato 01 y hasta muestra el número de seguridad social del trabajador. De esta forma, la empresa simulaba pagar las prestaciones sociales al incluir el número de seguro social.

Durante seis meses, la empresa Binhard Innovation SA de CV les facturó a los trabajadores de Salud, mientras que Onkous México SA de CV lo hizo solamente por un mes y con los mismos importes y características.

Antes de hacer las denuncias en línea, los empleados volvieron a ingresar al portal del SAT con su RFC y Contraseña y como por arte de magia, todos los CFDI expedidos por Binhard Innovation SA de CV y por Onkous México SA de CV habían sido cancelados el pasado viernes 10 y sábado 11 de noviembre. ¿Haría la cancelación masiva el SAT ante la situación detectada o las mismas empresas cancelaron sus CFDIs?

Se había comentado que también estaba Radiomóvil Dipsa dentro de las consideradas empresas fantasma; debió ser un error del reportero.

Al parecer todos los CFDIs ya fueron cancelados, sin embargo es necesario hacer la denuncia correspondiente para que exista un antecedente de estos esquemas agresivos de defraudación fiscal y sobre todo para que las autoridades hacendarias investiguen el delito y se llegue a las últimas consecuencias con sus representantes legales. Del mismo modo, la investigación debe extenderse a las oficinas de gobierno, pues tal parece que el enemigo está adentro.

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