Debido a la noticia de que Ford retiraba sus inversiones de México por presiones de Donald Trump, algunos usuarios de las redes sociales han llamado a un boicot en contra de la compañía de autos, exhortando a los usuarios que no compren autos de la marca Ford. Los que promueven este boicot señalan que es el comprador quien tiene el poder y no la compañía.
Ford anunció que retira mil 600 millones de dólares de una planta que estaba construyendo en San Luis Potosí. Algunos advierten que la decisión de los ejecutivos de Ford se debió a la amenaza del próximo presidente de los Estados Unidos de subir los impuestos a la importación. Quienes conocen del tema señalan que un boicot a Ford antes que afectar a la compañía afectaría a miles de trabajadores, cuyas familias dependen del sueldo que ganan en esa compañía.
Es por ello que antes que dejarse llevar por las vísceras y promover un boicot en contra de una compañía, valdría la pena cuál es el objetivo y si en realidad eso arreglaría el problema. No vaya a ser que por dejarnos llevar por la indignación, terminemos perjudicando a personas que no deben nada en este tema.
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