Francisco de Luna / Xalapa, Ver. Entre patadas, empujones, gritos, participantes que saltan vallas metálicas, contingentes que se intercalan en el desfile y protestas fueron parte del escenario durante este primero de mayo en la ciudad de Xalapa.
Los organizadores no pudieron tener control del evento del Día del Trabajo en el que marcharon miles de empleados que llegaron de diversos municipios de la entidad veracruzana.
La primera manifestación fue contra el caso del ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, al indicar que no hay nada qué celebrar mientras no se le dicte sentencia y que sus allegados anden en libertad.
Las expresiones del gremio de jubilados no se dejaron esperar y a través de amplias pancartas escribieron «demandamos el pago oportuno de la nómina» y exigieron larga vida al Instituto de Pensiones del Estado (IPE).
Mientras que otro grupo de empleados de la UV también pidieron respeto a la autonomía financiera de la Universidad Veracruzana aprobada por el congreso del estado. Y además entre los integrantes del desfile se alzaba una cartulina en la que se leía que la detención de Duarte fue pactada y por lo tanto sugieren «no más impunidad».
Fueron los trabajadores de la UV quienes mayor número de manifestaciones encabezaron como la exigencia de que no haya reelección de la rectora Sara Ladrón de Guevara y que no permitirán que esta casa de estudios entre en crisis económica y que la rectoría sea millonaria.
El desorden en el desfile generó que algunos contingentes pelearan por los espacios como los sindicalizados de la UV contra los de una gasera de Xalapa.
Posteriormente, entre las calles Juan de la Luz Enríquez y Ávila Camacho, las distintas agrupaciones se disputaban el paso provocando molestias, golpes y jalones que no pasaron a mayores asuntos de gravedad.
Esto ocurrió entre los sindicalizados de Salud y de Fesapauv frente al palacio municipal y esquina del parque Benito Juárez.
Ahí mismo se arremolinaron integrantes de organizaciones sociales que protestaron contra el gasolinazo, los desaparecidos, los secuestros y las evaluaciones magisteriales.
Incluso otras agrupaciones como de comerciantes les impidieron desfilar, mientras que otros sectores de la Universidad Veracruzana optaron por abandonar y salirse del desfile.
Al final de los conatos de broncas llegaron los elementos policiacos pero al igual que los organizadores nada pudieron hacer para mantener orden.
En este desfile estaba prevista la participación de 15 sindicatos con un total de 52 mil 890 trabajadores, sin embargo no todos pudieron concluir porque algunos decidieron salirse por la desorganización y no exponer a su gente.
En el estrado estuvo el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, así como el gabinete estatal.
Comentarios