No cabe la menor duda que cuando dos boxeadores mexicanos se trepan arriba del ring, es garantía de un combate de primer nivel. La pelea entre Juan Francisco Estrada, el Gallo, y Carlos el Príncipe Cuadras, fue un espectáculo de primera. De entrada, Cuadras sorprendió al manejar mejor la pelea desde su larga distancia con un jab, que fue clave para mantener la distancia e iniciar sus combinaciones. Es más, mantuvo una clara diferencia en los primeros cuatro asaltos, especialmente en tres cuando logró llevarlo a la lona.
Sin embargo, la hombría, técnica y entrega del Gallo Estrada pudieron dar la vuelta a un combate que se caracterizó por su dureza, frente a un rival que se entregó al 100 para deleite de toda la afición. Sería hasta el round 11 cuando el gallo se aplicó y con dos durísimos golpes mando en dos oportunidades a un Príncipe Cuadras que había vendido muy cara su derrota.
Lo cierto es que Carlos Cuadras, perdiendo, ganó el reconocimiento del respetable, ya que se pudo ver que venía con ganas de vencer al Gallo Estrada. Con combates de este calibre sale ganando la afición y el box mexicano, que por cierto es considerado por los especialistas como uno de los mejores del mundo. Nada que ver con el remedo de pelea entre Teofimo y Lomachenko, que de vez en cuando se tiraban golpes de poder. Aquí sí hubo box y de primer nivel.
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