Seis personas perdieron la vida la noche del jueves 5 de junio tras el colapso de un túnel clandestino en la comunidad de Ejidos de Cuautlacingo, municipio de Otumba, Estado de México. El incidente ocurrió alrededor de las 20:00 horas en un predio baldío ubicado en la calle Insurgentes, a unos 300 metros de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex). Según reportes oficiales, el túnel presuntamente se construía para realizar una conexión ilegal con el ducto y extraer combustible, práctica conocida como huachicoleo.
De acuerdo con las autoridades, las víctimas realizaban labores de excavación cuando el terreno cedió, atrapándolas bajo los escombros. Vecinos de la zona, alertados por el incidente, solicitaron apoyo a través de una camioneta con altavoz que recorrió la comunidad, pero impidieron el acceso de los cuerpos de emergencia, incluyendo Protección Civil y la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
Los pobladores llevaron a cabo las labores de rescate por su cuenta, extrayendo los seis cuerpos sin vida. Inicialmente, se negaron a entregarlos a las autoridades con la intención de sepultarlos según sus usos y costumbres, pero tras varias horas de diálogo, accedieron a que las autoridades trasladaran los cadáveres al anfiteatro local para las diligencias periciales.