Durante su informe de los primeros 100 días de su gobierno, la gobernadora Rocío Nahle anunció que Turismo y Cultura se fusionarán en una sola Secretaría. Vale mencionar que, sin diagnóstico, sin planeación, sin estructura administrativa, a puro capricho, en el regodeo de su estulticia, Cuitláhuac García hizo del Instituto Veracruzano de la Cultura, IVEC, una Secretaría. Resultó un absurdo, pues el IVEC ni siquiera podía cumplir con sus obligaciones de instituto, menos lo iba a hacer como Secretaría. Para colmo, la gobernadora puso en esa dependencia a una mujer sin los atributos intelectuales para asumir el cargo. Eso lo demostró Xóchitl Molina en menos de 100 días.
Entiendan, un instituto de cultura fundado por una mujer como Ida Rodríguez Prampolini, no puede terminar en las manos de una mujer insensata, insensible, que puso a dormir en el suelo a los artesanos invitados a una muestra de artesanías. Hace bien la gobernadora Nahle en regresar a su estatus original una dependencia conducida por una funcionaria de cuarta. Una funcionaria que con su actitud hacia los periodistas también muestra su real estatura.
Una mujer que huye, que no responde a los cuestionamientos ni a los compromisos con los veracruzanos ni al cargo que le ofreció la gobernadora, sólo puede tener un destino, el ostracismo. El problema va a ser que en Turismo despacha otra funcionaria de cuarta, la Nena de la Reguera; eso sí, muy socialité la señora, pero funcionaria de cuarta.