Rosalinda Ávalos es una madre de San Luis Potosí a la que le asesinaron a sus dos hijos. Ella es policía investigadora, y como dice, ha hecho muy bien su trabajo, por lo que acusó a Sabas Santiago Ipiña, quien ya había sido inscrito en dos de las listas para quedar como candidato al puesto de juez de oralidad penal para los comicios del 1 de junio. Rosalinda Ávalos, policía investigadora, descubrió que sus compañeros de la policía ministerial de San Luis Potosí estaban involucrados en el robo de vehículos en San Luis Potosí. Ella tuvo que reportarlo a sus superiores y a partir de ahí empezaron las amenazas que después terminaron con la muerte de sus dos hijos.
Rosalinda Ávalos levantó la voz ante el Congreso de San Luis al enterarse que el abogado que defendía a los miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación, Sabas Santiago Ipiña, iba a ser parte del Poder Judicial. Rosalinda Ávalos dijo: «Por hacer bien mi trabajo, mataron a dos de mis hijos. Sabas Santiago Ipiña participó. Él es compadre de uno de los imputados, que está en el penal de Sonora, Miguel ‘N’. Se le han encontrado nexos con la delincuencia. Por eso quiere entrar [en la elección judicial], para poder manipular el proceso y dejar en libertad a los que mataron a mis hijos».
Al Congreso de San Luis Potosí no le quedó de otra que sacar a Sabas Santiago Ipiña. Sin embargo, ¿cuántos abogados de narcos se les estarán colando? ¿Cuántos están dejando entrar a propósito?