Claudia Elena Lozano Doria, quien trabajó durante 13 años en la Fiscalía de La Guajira, fue sentenciada a 12 años de prisión luego de que se descubriera que utilizó documentos falsos para hacerse pasar por abogada. Lozano ocupaba un alto cargo en la dependencia, donde emitía órdenes de captura y cerraba expedientes judiciales, todo sin contar con los estudios ni las certificaciones necesarias para ejercer como jurista.
El fraude fue descubierto cuando Lozano intentó postularse para ser jueza de la Judicatura de Valledupar. Durante el proceso de verificación, las autoridades detectaron que los títulos que presentó eran falsos y que no estaba registrada como abogada. La investigación reveló que había suplantado la identidad de María Consuelo Mestre, una verdadera abogada de Montería, copiando su currículum y antecedentes laborales para conseguir el puesto en la Fiscalía.
María Consuelo Mestre fue una pieza clave en el juicio, donde testificó que el currículum que Lozano presentó pertenecía a ella, confirmando la suplantación de identidad. Gracias a este testimonio y a las pruebas recabadas, Lozano fue condenada por los delitos de fraude procesal y falsedad en documento privado.
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