El miércoles 14 de agosto de 2024, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró al brote de MPOX (Viruela del Mono) una emergencia mundial. La decisión responde a la grave amenaza que representa una nueva variante del virus, el clado Ib, que podría haberse extendido a cuatro provincias en África. El comité de emergencia de la OMS, tras una reunión virtual con el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus, determinó que la situación alcanza el nivel más alto de alarma bajo el derecho sanitario internacional.
Este brote, que afecta principalmente a la República Democrática del Congo, ha llevado a la declaración de emergencia de salud pública de importancia internacional por segunda vez en dos años. Actualmente, 13 países africanos reportan casos de MPOX. La República Democrática del Congo destaca como el principal foco de infección con más de 14,000 casos y al menos 524 muertes.
Jean Kaseya, Director General de los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades, subrayó la urgencia de la situación: “MPOX es una realidad, está afectando a nuestros países. La gente está muriendo. Necesitamos abordar esto. Aprendimos de la COVID-19 y no queremos repetir el mismo error”.
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