El bullying en las escuelas es un problema que con el paso del tiempo se torna más peligroso y difícil de erradicar. Muchos de los que son víctimas de este acoso escolar toman la decisión de quitarse la vida al ver que nadie hace nada por ayudarlos. En la ciudad de Lille, Francia, se dio el caso de una niña de 13 años, identificada como Lindsay, que ha generado preocupación entre la sociedad debido a que la menor tomó la decisión de suicidarse al verse acosada y agredida por parte de sus compañeros. La muerte de Lindsay puso en evidencia la falta de seguridad en las escuelas, pues a pesar de que la menor daba señales de lo que ocurría, la institución no hizo nada por brindarle apoyo.
El caso generó el repudio de la sociedad en contra de los alumnos que le hacían bullying a la menor, pues luego de su muerte varios de los implicados crearon páginas falsas en Facebook, en donde se burlaban de su muerte. La policía cibernética informó que tras una larga investigación dieron con estas páginas en donde había mensajes que decían: «Lindsay por fin está muerta», «Voy a mear en su tumba», «ya se murió esa zorra», «le voy a quemar la tumba».
Algunos de los menores implicados en el caso de Lindsay están a disposición de las autoridades. Vale señalar que días antes de que la menor se quitara la vida escribió una carta dirigida a sus padres en donde les hacía saber el martirio que estaba viviendo. Incluso, en un párrafo señala que ella y una de sus mejores amigas habían sido amenazada de muerte. Al respecto, el ministro de educación francés, Pap Ndiay, calificó el suceso como un «fracaso colectivo de la nación».
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