De hecho, el panfleto también anotaba: «Todos aquellos que tengan malos pensamientos para mi presidente Lic. Andrés Manuel López Obrador, hijo predilecto de reyes de mi corazón, hijo del cielo y de la tierra».
En otro de los párrafos lanzaban una advertencia: «Todos los malos pensamientos que tengan y que por medio de los periodistas que se venden por unas monedas de plata como en el tiempo de Judas, tiempo final como el Apocalipsis. Tiempo para los malos y serán desaparecidos». La verdad, con ese lenguaje milenarista, de secta religiosa, los mensajes no se pueden tomar a la ligera. Parece salir de gente enajenada, a la que le lavaron el cerebro.