Dice el dicho que le que ríe al último ríe mejor y tal parece que ese dicho le aplica muy bien a Edmundo Jacobo Molina, quien fungía como secretario ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE). Se recordará que, con la aprobación del Plan B, inmediatamente fue cesado de sus funciones a pesar del descontento de los actuales consejeros.
Sin embargo, el Noveno Tribunal Colegiado en Materia Administrativa revocó la negativa del Juzgado Décimo Segundo de Distrito en Materia Administrativa, de conceder la medida cautelar a Edmundo Jacobo, por lo que concedió la suspensión provisional contra la aplicación del artículo transitorio décimo séptimo de la reforma electoral conocida como Plan B, donde se ordenó la modificación de las facultades de la Secretaría Ejecutiva del INE y que la persona titular de dicho cargo cesara en sus funciones a partir de su publicación.
Con esta determinación, es un duro golpe para el presidente López Obrador quien había celebrado con bombo y platillo la salida de Edmundo Jacobo Molina, quien fungía como secretario ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE).
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