El presidente de México decidió conmemorar el Día Internacional de la Mujer con sus mujeres, que por cierto, no representan a las mujeres en México, pues para ellas el 8 de marzo debería ser el día en el que las mujeres deberían rendir pleitesía a su presidente. De hecho, las morenistas que se atrevieron a marchar este 8 de marzo en las calles de la Ciudad de México llevaban su “pejepin”, la figura de amlito que las acompañaba en su lucha. Ignorante de lo que significa el 8 de marzo, López Obrador felicitó a las mujeres en su día, como si fuera su cumpleaños: «Por eso, felicidades a las mujeres». Las festejó desde atrás de las vallas, escondido. No sabe el presidente que el Día Internacional de la Mujer se conmemora la lucha que las mujeres llevan a cabo día con día para acabar con la desigualdad social, laboral, cultural. Una lucha que no termina, que continúa, que se delega a las nuevas generaciones.
En este 2023 los contingentes de mujeres conmemorando su lucha fueron más grandes, más nutridos, más diversos. Marcharon mujeres de todas las edades, desde niñas hasta mujeres de la tercera edad. Cada año las mujeres son más visibles, su lucha es más frontal, más efectiva. Sin embargo, en el gobierno de la Cuarta Transformación las mujeres están siendo más ignoradas.
Por ejemplo, el gobernador de Veracruz ignoraba las acusaciones de acosos contra mujeres policías en la SSP por parte de su jefe de ayudantía; también ignoró las acusaciones de acoso en la secretaría de Gobierno y las acusaciones en contra del golpeador Felipe Daniel Castro Girón, su protegido y amigo personal que buscaba un puesto en el gobierno municipal de Xalapa. Y así, como el gobernador de Veracruz ignora a las mujeres, su lucha y las injusticias que padecen, así el presidente López Obrador, blindó Palacio Nacional, para que las mujeres, con sus protestas, no desprestigiaran su gobierno. En lugar de escucharlas, decidió ignorarlas.
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