En conferencia de prensa el gobernador de Veracruz declaró: «Yo lo había comentado también aquí y lo había advertido, que era muy lamentable que algunos actores políticos de nivel municipal entraran en contacto con la delincuencia organizada, que las consecuencias se iban a ver y miren: ahí están las consecuencias. Entonces ojalá y esto ya no se ignore más y como lo dijo la Fiscal, vamos a hacer justicia».
¿Presentó pruebas el gobernador para sostener sus afirmaciones? No, no presentó una sola prueba, no habló de las conclusiones de una investigación; todavía no enterraban a Isauro Ambrosio cuando el gobernador ya lo estaba revictimizando. Por supuesto, a estas alturas las declaraciones del gobernador de Veracruz nada aportan, sólo incomodan y a ratos hasta causan risa. Está de más exigirle al gobernador respeto y responsabilidad. No se le pueden pedir peras al olmo; «lo que natura non da, Salamanca non presta».