Ya lo habíamos dicho, a Rosario Piedra Ibarra le ganó la militancia. Morenista y sierva de López Obrador, creyó que podía granjearse el favor de su presidente si ella, como él, arremetía contra el INE. Así que, olvidando que ella es titular de un organismo autónomo, la Comisión Nacional de Derechos Humanos, se atrevió de pedir a los legisladores que aprobaran la reforma electoral del presidente López Obrador. Pero esa manifestación de apoyo a su presidente al parecer lo hizo motu proprio, olvidándose de que la CNDH tiene un Consejo Consultivo que es quien debe dar la postura oficial de ese organismo descentralizado.
Es por ello que los miembros de ese consejo manifestaron su rechazo a las opiniones de Rosario Piedra: “Las y los integrantes del Consejo Consultivo de la CNDH, RECHAZAMOS el pronunciamiento que, sobre el INE, se emitió. Aclaramos que, la RG 46/2022 aprobada, NO habla de transformar al árbitro electoral, es una Recomendación sobre memoria histórica. El comunicado circulado por la CNDH, es una interpretación exclusiva de ésta, por lo que este Consejo NO la comparte ni acompaña. Aquí nuestro comunicado emitido por la totalidad de las y los Consejeros”.
¿Qué le queda a Rosario Piedra después de esto? Pues muchos ya piden la renuncia de una mujer que ha demostrado que más que amor a la democracia, siente devoción por su “mesías tropical”.
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