Fue el viernes siete de octubre que en un municipio de Chiapas un perro de raza pitbull atacó violentamente a un presunto ladrón. Las mordidas que este can ocasionó al ladrón fueron tan brutales que varios medios indicaron que Max le arrancó el brazo a su víctima. Para la suerte de este delincuente, salió con vida del ataque luego de que los dueños los separaran. Sin embargo, esta agresión hizo que los familiares del ladrón mordido por el lomito arremetieran contra el can y sus ancianos dueños, quienes sufren discapacidad auditiva y visual.
Ellos pidieron a las autoridades competentes que Max fuera sacrificado al ser señalado como «peligroso«. En un inicio, se pensó en «dormir» al perro pitbull, pero una asociación animalista comentó que el can defensor no será tocado. El grupo Animal Moc expresó que Max está siendo cuidado en un lugar seguro.
«Quiero señalar también que el perro habita con personas adultas que tienen discapacidad visual y auditiva, lo único que ha hecho es defender su hogar, las personas que habitan, personas que padecen epilepsia. No permitiremos que le pase algo al perrito, no creemos que las autoridades actúen en contra del can que le dió a un intruso su merecido«, expresaron los defensores de los animales.
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