Señala el libro de Proverbios 11:22: «Como nariguera de oro en el hocico de un cerdo, así es la mujer que es bella, pero que está apartándose de la sensatez». Esto es lo que nos viene a la mente cuando nos enteramos que los publicistas de Amber Heard se están valiendo de cualquier artificio con tal de levantar la imagen de la actriz que fue encontrada culpable de mentir en el juicio en contra de su exmarido Jhonny Depp. En varias notas publicadas en medios de comunicación se lee lo siguiente: El rostro más bello que existe es el de Amber Heard, así lo dice la ciencia.
La actriz tiene un 91,85% de compatibilidad con la medida que los griegos utilizaban para descubrir la belleza de la naturaleza y la geometría. Vale señalar que en el juicio que duró varias semanas, la actriz fue exhibida como una mujer de conducta errática, con problemas psicológicos, quien en algún momento le puso heces fecales en la cama a su marido, ella dice que como una broma «que se salió de control».
Cierto es que muchos hombres buscan en la mujer altos estándares de belleza, sin embargo, si esa belleza no va acompañada de sensatez, como señala la Biblia, la mujer misma se devalúa por su conducta, por sus actos, por su manera de abordar la vida.
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