El tablero político de Morena se ha movido. Después de la derrota en el congreso federal donde no se pudo obtener la mayoría calificada para aprobar la reforma eléctrica, han quedado varios políticos en el limbo político. Uno de ellos es Mario Delgado, quien no ha tomado bien la derrota y ahora, como vil porro sale amenazar con exhibir en todo el país a los diputados que votaron en contra de la reforma del presidente López Obrador.
Según su entendimiento, quiere ocupar como ariete los nombres y rostros de los supuestos traidores de la patria, en el contexto de las elecciones próximas en seis estados. Sin embargo, sus propios conocidos le han señalado que esa campaña sería un grave error, ya que solo quedará exhibido como el principal culpable de la debacle morenista del domingo negro de abril.
Por lo pronto, los amigos de las lenguas de doble filo, dicen que el número uno de la 4T, no lo quiere cerca de palacio nacional. Ni hablar, el amigo del “carnal Marcelo”, tendrá que sacarse la espinita con los resultados de las elecciones próximas. No hay de otra, es ganar o morir.
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