Armando Ortiz / Xóchitl “la bailadora” Arbesú fue impuesta por Rocío Nahle en el gabinete de Cuitláhuac García. Cuitláhuac ni siquiera sabía quién era la recomendada de la Nahle, por ello, el día que la presentó no supo decir nada bueno de ella, sólo que sabía bailar muy bien. ¡Ridículo! En adelante, la secretaria de Turismo de Veracruz sólo se movió entre el absurdo y la ocurrencia. Cuando en 2019 vio la oportunidad de ir a España con los gastos pagados, no lo pensó dos veces y juntó a un grupo de lambiscones y “chichifos” y se fue a hacer el ridículo a España, a bailar La Bruja y comer en restaurantes caros. Cuando llegó a Veracruz y le preguntaron qué beneficio había tenido el tour que se aventó con sus “chichifos”, la señora dijo que había conseguido lo que ninguna secretaria de Turismo de cualquier estado de América, había conseguido un convenio con la empresa naviera española Pullmantur Cruises para recibir cruceros de aproximadamente dos mil turistas para el verano del próximo año. Esos pinches cruceros nunca llegaron. Ese era el momento para correr a la secretaria de Turismo. Xóchitl Arbesú agarró de excusa la pandemia y se pasó dos años cobrando sin hacer absolutamente nada; así, de manera literal, nada. ¿De qué se habrá dado cuenta el gobernador Cuitláhuac García que, apenas terminada la Cumbre Tajín decidió darle una patada por el trasero a la Arbesú? Todavía le dio tiempo a la señora de soltar un último absurdo. Dijo que la Cumbre Tajín tenía tanta relevancia internacional como el Festival Cervantino. Ahora a ver que tal nos va con Iván Martinez Olvera. Si es tan eficiente como su hermana Waltraud Martínez Olvera, titular de la Oficina del Programa de Gobierno, entonces estamos jodidos.
Además de chairos, huevones. Seguidores de López Obrador recolectan firmas para que el 13 de noviembre, día del natalicio de AMLO, sea día de asueto
Esos chairos son una fauna aparte. Marisol Ordóñez, chaira de corazón, lanzó una petición en Change.org para que se decrete el 13 de noviembre como día de asueto. ¿Por qué razón? Pues porque ese día nació su mesías tropical, Andrés Manuel López Obrador. En la página de Change aparece la siguiente petición: “Oficializar como día de descanso el 13 de noviembre, para celebrar el natalicio de AMLO”. En la justificación de la petición se lee: “Se propone que se decrete como día oficial de descanso el 13 de noviembre para celebrar el natalicio del presidente Andrés Manuel López Obrador. Es una forma de rendir homenaje por su incansable lucha a favor de la justicia social y la igualdad de los seres humanos. Hasta la fecha únicamente se conmemora el natalicio de Benito Juárez”. Está claro que este gobierno está criando a una clase de ciudadanos que sólo espera del gobierno becas, pensiones y días de descanso. Pero cuando se trata de trabajo, eso no, eso claro que no. Hasta el momento la petición sólo tiene 367 firmas, pero espere a que se enteren más chairos y la cuenta subirá.
¿Cuánto le pagaron a los famosos por el video #selvamedeltren? “Ojalá tuviéramos dinero para hacer una campaña grande y pagar, pero no tenemos, es la verdad”
Dice el presidente a bote pronto que los famosos que grabaron un video para oponerse a una parte de la ruta del Trena Maya participaron en el video porque fueron pagados por los conservadores. Tal vez ni cuenta se dio López Obrador que entre los participantes en el video #selvamedeltren estaba Ofelia Medina y Rubén Albarrán, dos activistas que desde hace décadas se han dedicado a defender a las comunidades indígenas. Si el presidente asegura que a esos famosos les pagaron, ¿tendrá pruebas? La periodista Sandra Romandía se dio a la tarea de investigar cuánto le pagaron a estos famosos. Lo primero que descubrió la periodista es que la lucha por la conservación ambiental de la selva en la Riviera Maya es de muchos años atrás. Señala Sandra Romandía en un artículo publicado en El Universal: “Este ejercicio me permitió saber que #SélvamedelTren no surgió de la nada: desde hace dos años un grupo de actrices y actores que son oriundos de Quintana Roo o han vivido ahí, en coordinación con buzos de las zonas mayas y conocedores de los terrenos, abrió distintos chats y canales de distribución de información sobre lo que estaba pasando. La inquietud real era poder participar activamente en el diseño de la obra con el fin de cuidar un área de México que consideran sagrada”. Vale señalar que estos artistas no se oponen al Tren Maya, sino que se oponen al cambio de ruta arbitrario que hace unos meses se anunció y que afectaría los cenotes y ríos subterráneos. Pero, ¿cuánto pagaron a cada famoso para que participara? Dijo una de las activistas: “Ojalá tuviéramos dinero para hacer una campaña grande y pagar, pero no tenemos, es la verdad”. No les pagaron, la participación fue altruista, sin afanes de lucro, sólo con el deseo de que el presidente se dé cuenta del daño ecológico que pueden causar si continúan devastando la selva.