El gobernador morenista Alfredo Ramírez Bedolla dijo, al anunciar el asesinato de César Arturo Valencia Caballero, alcalde de Aguililla, que tanto el Gobierno estatal como el Gobierno Federal tenían implementada una estrategia de pacificación en la zona. Pues a pesar de esa estrategia hace una semana fusilaron a 17 personas en San José de Gracia, Michoacán; el alcalde, tratando de tapar el sol con un dedo, dijo que no se encontraron cuerpos, por lo que entonces tal vez no hubo crimen. Sin embargo, los sicarios tuvieron hasta cinco horas para limpiar la escena del crimen.
Al mediodía del viernes, la Fiscalía General de Michoacán comunicó vía Twitter: «#FiscalíaMich se desplaza al predio Las Parcelas de Castillo, lugar donde fue localizado sin vida René Cervantes Gaytán, asesor del presidente municipal de Aguililla. En apego al protocolo, realizará las actuaciones periciales para esclarecer los hechos».
Vale mencionar que, a pesar de estos crímenes, el presidente de México sigue diciendo que su estrategia de pacificación sigue dando resultados: «Aprovecho para enviar mi pésame a sus familiares, a sus amigos y a toda la gente de Aguililla, donde asesinaron al presidente municipal. Llevamos ya meses trabajando (en la zona) porque estaba tomada (por el narcotráfico) esa región». Claro, si esa estrategia incluye asesinar alcaldes y a sus asesores, entonces sí está dando resultado.
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