Hipólito Rodríguez ha sido el peor alcalde que Xalapa ha tenido en su historia como municipio. Él lo sabe y a estas alturas hasta le da vergüenza. Sólo hay que verle la cara cuando miente diciendo: “Hoy podemos decir con orgullo que Xalapa florece, hoy tenemos un municipio más verde, más iluminado, más limpio, más transparente, más seguro y con más igualdad, estamos mejor preparados para el futuro”. Pobre imbécil, no puede ocultar la vergüenza que acude a su cara cuando pronuncia semejantes mentiras. En los últimos días se ha dedicado a dar entrevista para hablar de lo que ha rescatado en el naufragio.
Dice Hipólito que ha sido el alcalde que más obra ha hecho y pronuncia cifras y números, pero no habla de todo el dinero que debió devolver a la federación, dinero de un presupuesto que no pudo ejercer o que le obligaron a regresar. Xalapa está sucia, atropellada por obras de revestimiento, obras que maquillan las calles para que parezca que el alcalde trabajó. Xalapa es insegura, porque en muchas calles el alumbrado público no existe.
Xalapa no es una gran ciudad, como sí lo es Orizaba, Veracruz o Boca del Río; Xalapa no lo es porque durante los últimos 4 años tuvimos como alcalde al sujeto con más títulos y doctorados en su haber, pero que sólo le sirvieron para demostrar que “lo que natura non da, Salamanca non presta”. Los títulos no pudieron ocultar tanta mediocridad.
Comentarios