Armando Ortiz / Quien salió bien embarrado con el caso de Fabián Cárdenas Sosa, alcalde electo de Lerdo de Tejada, detenido, acusado de secuestro agravado, fue Esteban Ramírez Zepeta. El gobernador, que también estaba en la jugada de sociedad de apoyo a este presunto delincuente, le echó todas las pulgas al perro más flaco, a Esteban Ramírez Zepeta, el llamado líder estatal de Morena. Defendió el gobernador a Gómez Cazarín, pero a Ramírez Zepeta lo tundió; lo hizo responsable de una candidatura que, a decir de él, desde un principio le pareció mala.
Dicen, los que conocen a Ramírez Zepeta, que el muchacho anda distraído; como enamorado dicen otros. ¿Cuáles son las razones de esta distracción que ha merecido el regaño del gobernador de Veracruz? Algunos vecinos de Homex, una zona habitacional de Xalapa cercana al Tronconal, dicen haber visto en varias ocasiones a Esteban Ramírez Zepeta acompañando a un jovencito robusto. Hasta hace poco lo veían continuamente, lavando un Ford Fiesta del año, lo veían comiendo elotes y esquites en la esquina cerca de un Fasti; pero ya se le ve poco.
Amigo del Facebook, Ramírez Zepeta no pierde oportunidad de darle likes a as fotos de su amigo, a quien por cierto colocó en una dependencia de gobierno del estado, con un sueldo muy inmerecido, cosa que el joven presume a sus conocidos; y es que, sin estudios universitarios, logró un puesto que le dio para compararse una casa en una mejor zona de la ciudad y un auto Ford Fiesta del año que a ratos le anda fallando: “Si manejo durante unas 5 horas comienza a perder potencia”.
Pues al parecer, este joven es una de las distracciones principales de Ramírez Zepeta y no puede ocultarlo. Pues con él se cumple la máxima que dice: “Hay tres cosas que el hombre no puede ocultar: El amor, el dinero y lo pendejeo”. Y Ramírez Zepeta no ha podido ocultar ni uno de los tres.
Fabián Cárdenas Sosa acusado del secuestro y muerte de Juan Carlos Montano; él se dice inocente: “Cometí el crimen de soñar”
En los dos últimos casos fuertes de la Fiscalía había una coincidencia que llamaba la atención. El 15 de noviembre fueron detenidos en Lerdo de Tejada dos hombres vinculados con el crimen de Juan Carlos Montano, hermano de Alejandro Montano, exsecretario de Seguridad Púbica en el sexenio de Miguel Alemán. De Lerdo de Tejada era alcalde electo Fabián Cárdenas Sosa, quien ganó bajo las siglas de Morena y que fue detenido por secuestro agravado. Los dos detenidos eran chofer y guardaespaldas de Cárdenas Sosa. De acuerdo con algunos medios, al revisar los teléfonos celulares de los detenidos se encontró que estos tipos, junto con Cárdenas Sosa, formaban parte de una presunta red de secuestradores de la zona.
Fabián Cárdenas Sosa, por su parte, se dice inocente, víctima de una injusticia. En sus redes sociales logró que sus abogados anotaran este texto: “Yo soñé con poder gobernar parejo, cometí el crimen de no ser diplomático, cometí el crimen de no tirar incienso al paso, cometí el crimen de soñar. Voy a atravesar este proceso con la cabeza erguida. Yo no estoy por encima de la justicia, por eso les pido a todos los que creen en mí, mantengan la calma, yo busco la paz no una revolución”.
Habría que recordarle a este sujeto la enorme lista de expedientes, denuncias, demandas mercantiles y laborales que hay en su contra.
Hipólito Rodríguez, ni la burla perdona: “Xalapa florece, hoy tenemos un municipio más verde”. Sus títulos no pudieron ocultar tanta mediocridad
Hipólito Rodríguez ha sido el peor alcalde que Xalapa ha tenido en su historia como municipio. Él lo sabe y a estas alturas hasta le da vergüenza. Sólo hay que verle la cara cuando miente diciendo: “Hoy podemos decir con orgullo que Xalapa florece, hoy tenemos un municipio más verde, más iluminado, más limpio, más transparente, más seguro y con más igualdad, estamos mejor preparados para el futuro”. Pobre imbécil, no puede ocultar la vergüenza que acude a su cara cuando pronuncia semejantes mentiras. En los últimos días se ha dedicado a dar entrevista para hablar de lo que ha rescatado en el naufragio.
Dice Hipólito que ha sido el alcalde que más obra ha hecho y pronuncia cifras y números, pero no habla de todo el dinero que debió devolver a la federación, dinero de un presupuesto que no pudo ejercer o que le obligaron a regresar. Xalapa está sucia, atropellada por obras de revestimiento, obras que maquillan las calles para que parezca que el alcalde trabajó.
Xalapa es insegura, porque en muchas calles el alumbrado público no existe. Xalapa no es una gran ciudad, como sí lo es Orizaba, Veracruz o Boca del Río; Xalapa no lo es porque durante los últimos 4 años tuvimos como alcalde al sujeto con más títulos y doctorados en su haber, pero que sólo le sirvieron para demostrar que “lo que natura non da, Salamanca non presta”. Los títulos no pudieron ocultar tanta mediocridad.
Twitter: @aortiz52 @lbajopalabra
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