Hace algunos días dieron a conocer que, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, había llegado un grupo de hombres fuertemente armados; estos sicarios venían en carros grandes de guerra. Las autoridades señalaron que estos hombres pertenecían al Cártel del Golfo o CDG, estos sicarios entraron a Monterrey con la orden de exterminar a los Zetas que aún se encuentran ubicados en esa zona. Tras su llegada al lugar comenzaron a darse hallazgos de cuerpos torturados los cuales señalaron eran personal de los Zetas.
La información señala que el Cártel del Golfo tiene la intención de exterminar a todos los posibles enemigos que puedan estorbar en su paso por Monterrey, Nuevo León. De igual manera, hace unas semanas, una investigación por parte de las autoridades, reveló que el presunto vínculo entre Samuel García y un distribuidor de los Zetas era cierto.
Cabe destacar que entre los cuerpos mutilados que se han ido encontrando en ese estado siempre dejan una manta, en donde el Cártel del Golfo se adjudica la masacre y deja un mensaje: “Esto va para todos los mugrosos traicioneros Llegó la barredora… aquí los pasados de verga no caben. No venimos a pelear con nadie, sólo a darle tranquilidad a toda la población y dejar que el gobierno haga su trabajo. Las extorsiones para el pueblo, gente de trabajo, municipios, empresarios, secuestros, cuotas, pagos de piso, se tiene que acabar y se van a terminar. Los jóvenes andarán en sus convivios, antros, cantinas, bares, restaurantes, sea una diversión sana. Se acabaron también los enguilados, amigos del amigo, nosotros no apadrinamos a nadie que esté en contra de nuestro reglamento. Cada quién en lo suyo y lo de nosotros no meternos ni pelear con el gobierno ni la población”, se lee en los mensajes.
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