En Argentina un jurado a dictado una sentencia sin precedente. El empresario Alejandro Rosario Manuel Leguizamón, de 55 años, dueño de una fábrica de membranas, fue sentenciado a 50 años de prisión por el delito de violación, entre otras cosas. Este sujeto estuvo abusando de sus cuatro hijas desde que las menores iban al jardín de niños. Las víctimas actualmente tienen 27, 29, 30 y 32 años. Fue en 2016 que estas mujeres decidieron demandar a su padre, quien a pesar de ser ellas mayores de edad, él las seguía acosando.
Romina, quien tiene 31 años relató a un medio argentino: “Desde que tengo uso de razón fui abusada muchas veces, lo denuncié porque ya era demasiado el acoso. Me costó mucho tiempo tomar esa decisión”. El sujeto se dio a la fuga en 2016, cuando supo de la denuncia, pero fue aprehendido en 2019 y fue dos años después que un tribunal dictó una sentencia de 50 años de prisión.
Alejandro Rosario, padre de las cuatro féminas, siempre negó los cargos, aunque en algún momento confesó: “A veces se me iba la mano”. Este sujeto llegó a pedirle a Romina que fuera pareja, que por su madre no se preocupara, pues la manarían a terapia.
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