Siempre lo hemos dicho, «no hay naco anónimo». El naco busca por todas las formas la manera de hacerse notar, de mostrar su naquez. Ahora bien, ¿de dónde sacan tanto engreimiento esos nacos funcionarios del gobierno de Cuitláhuac García para creer que tienen todo el derecho, sólo por ser funcionarios, para ocupar el patio del Parque Juárez como su estacionamiento? El engreído cree falsamente que vale, que tiene más méritos que los demás. Ningún gobierno anterior a este de la 4T, se había sentido con derecho para ocupar este patio como estacionamiento; vaya, ni el naco de Fidel Herrera.
En redes sociales se ha mostrado cómo algunos funcionarios subieron sus camionetas al patio del parque para que las puertas del Palacio de Gobierno les queden cerca; nada más salir de sus autos de lujo y entrar al recinto.
La falta de respeto es evidente, no sólo a este monumento histórico que es el Parque Juárez, sino a los xalapeños, a los que no se les permite subir sus autos en este lugar. ¿Acaso el gobernador Cuitláhuac García los corregirá y prohibirá que suban sus autos al patio del Parque Juárez? Si no los corrige quiere decir que él es tan naco y engreído como sus subalternos.
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