Tras recibir una sentencia de 23 años por violar a su hijastra de cinco años en Cruzeiro al Oeste de Paraná, Brasil, Alex Sandro de Souza Mota, fue terriblemente asesinado por los convictos de la prisión donde estaba recluido. La información señala que Alex fue atacado por la espalda con un cepillo dental que tenía afilada una de sus puntas. Después de apuñalarlo, otros reos ayudaron a sostener a Alex en una mesa donde le quitarían la piel hasta sacarle el corazón. Los reos extrajeron el corazón de Alex Sandro de Souza Mota, para posteriormente castrarlo.
Los guardias contaron que cuando hallaron a Alex estaba tendido en la mesa sin el corazón y a la hora de acercarse más al cuerpo, se percataron que tenía su miembro colocado en la boca. Los reos al parecer cobraron venganza en contra de Alex Sandro de Souza Mota, por haber cometido abuso sexual a una niña menor de edad.
Los reos apuñalaron, le quitaron el corazón y cercenaron su miembro para después colocarlo en su boca. Alex, sufrió uno de los más terribles asesinatos por manos de los mismos reos con los cuales estaba ingresado en prisión.
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