Es un verdadero cochinero. ¿Quién que teme ser detenido por la policía le pide a su esposa que llame al 911 porque escuchó disparos en el edificio donde vivía? César Julián Herrera Víquez desapareció desde el viernes por la tarde. Los familiares por supuesto preguntaron en las corporaciones policíacas, en los ministerios públicos. La Comisión Estatal de Búsqueda Veracruz, dependiente de la Secretaría de Gobierno, emitió un boletín de búsqueda desde el sábado 7 de agosto. La dependencia que tenía a César Julián no le comunicó a esta dependencia del propio gobierno que la persona reportada como desaparecida había sido detenida por ellos.
Después, la misma tarde del sábado soltaron un boletín de prensa espurio en donde acusaban a César Julián de delitos federales, pero sobre todo, lo acusaban de tener vínculos con los Yunes. Ahora, la fiscal espuria, como si su dependencia hubiera procedido de manera impecable y pulcra, se atreve a informar: «La Fiscalía General informa que el ciudadano César Julián Herrera Víquez, fue puesto este día a disposición de la autoridad ministerial por elementos de la Fuerza Civil. Respetando sus derechos humanos y dentro del término constitucional, será determinada su situación jurídica».
¿Por qué cuando acudieron a preguntar por el desaparecido desde el viernes no informaron lo anterior? Todo en el estado es un tremendo cochinero. Desde la Fiscalía del estado, la Secretaría de Seguridad, la Fuerza Civil, los jueces; todos actúan como si fueran el crimen organizado.
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