Tras una investigación de cinco meses se concluyó que el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, acosó sexualmente a 11 mujeres. El informe mostró que Cuomo realizó toqueteos, besos, abrazos no deseados y comentarios inapropiados con diferentes trabajadoras, en su mayoría jóvenes, creando un ambiente de trabajo toxico. La fiscal a cargo del caso, Letitia James, expresó que tanto el gobernador, como miembros de su equipo de trabajo tomaron represalias contra al menos una exempleada por exponer lo sucedido.
El Gobernador negó las acusaciones a través de un video en redes sociales diciendo: «Nunca toqué a nadie de manera inapropiada ni hice avances sexuales inapropiados. Tengo 63 años, viví toda mi vida adulta a la vista del público. Eso no es lo que soy». Sin embargo, dentro de los testimonios de las mujeres, una mencionó que le metió la mano debajo de su blusa para tocarle el pecho y otra expresó que le preguntó si estaba dispuesta a tener relaciones sexuales con un hombre mayor. Entre las once agraviadas, nueve son o eran funcionarias estatales de Nueva York y una de ellas policía.
El presidente Joe Biden pidió la renuncia del gobernador y dijo entender que la Legislatura Estatal de Nueva York podría abrirle un juicio político a Cuomo, aunque este ha rechazado las acusaciones para que renuncie al cargo. El futuro de este político es un gran signo de interrogación pues no es la única acusación en su contra, existe una denuncia por la presunta manipulación del número de muertes en casas de ancianos durante la pandemia.
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