Cuando todo parecía indicar que el joven de 22 años moriría en ese momento, su mujer Laura O., de 23 años tomó un martillo y sin más le pegó en la cabeza al hombre armado. Al ser así, esta chica cogió el arma del agresor de su esposo y amenazó al otro sujeto que entró a su casa, pero este logró escapar del lugar.
Tras esto, Laura O. llamó a la policía y estos al ver la escena contactaron con una ambulancia para que se llevaran a los heridos al hospital. El hombre al que dieron el martillazo en la cabeza presentó una herida de ocho centímetros de profundidad, lo que le provocó una lesión grave en el área craneoencefálica.