Desde que Alfonso Cepeda vino a ocupar el lugar que ocupaba de manera ilegítima Juan Díaz de la Torre, éste ha señalado que su gestión terminará hasta el 2024. Muy a pesar de que su encumbramiento nunca haya sido ratificado por un congreso nacional, máximo órgano de gobierno dentro del SNTE. Desde el año pasado, a escasos meses de comenzar la pandemia en México, y debido a la presión de grupos disidentes que buscan elecciones libres y democráticas, Alfonso Cepeda, junto con su comitiva, simuló que pronto habría elecciones democráticas de acuerdo a las nuevas exigencias que marca la Ley Laboral.
Sin embargo, se atravesó una pandemia que ha durado más de lo que se esperaba, además no se puede descartar que aún el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje no se ha manifestado de manera concreta sobre el dichoso reglamento de elecciones, que pretendía Cepeda Salas que se le aprobara, un reglamento mañoso que, de entrada, dejaba fuera a los jubilados y limitaba la participación a cargos sindicales, si no se contaba con una antigüedad superior a los ocho años de haber tenido una cartera sindical.
Hoy, bajo una clara supeditación del SNTE al gobierno de la Cuarta Transformación, se respira un ambiente de inconformidad con la actual representación sindical por parte de muchos maestros. No obstante, ha quedado claro que, para que en el SNTE se lleven a cabo elecciones libres y democráticas, éstas tienen que comenzar primero por la renovación del actual Comité Ejecutivo Nacional. Por cierto, a la que se ve algo despistada en sus funciones es precisamente a la responsable de la Secretaría del Trabajo, Luisa María Alcalde.
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