Hay una foto de la reportera Ángeles González de Al Calor Político. Está fechada el día 21 de noviembre de 2015. Entonces Cuitláhuac García era diputado y había acudido a apoyar a los maestros que rechazaban la Reforma Educativa de Peña Nieto. Su gesto lo dice todo. Se le ve furioso, pero detrás de esa furia hay miedo; eso lo sabemos ahora. Porque su furia de aquel entonces era una mascarada, un montaje que el mismo ensayó para hacerse pasar como un activista que apoyaba desde su postura de diputado a los maestros veracruzanos. Después lo zarandearon un poco, parte del espectáculo. Gritó, se dejó jalonear, volvió a gritar y regresó a esa falsa furia, ahora lo sabemos. Ya siendo gobernador Cuitláhuac García se burló de los maestros, se burló de la educación poniendo a un stripper como titular de la Secretaría de Educación, se burló de los veracruzanos.
Ya siendo gobernador también se olvidó de las luchas magisteriales, antes bien, Cuitláhuac García se convirtió en lo que tanto había repudiado, en un vil represor. Las imágenes del desalojo de maestros, agremiados al Sindicato Democrático de Trabajadores de la Educación (SDTEV), de las oficinas de la SEV no dejan lugar a dudas. Los policías llevaban orden de madrear gente, de llevarse a los líderes de esa manifestación, a como dé lugar. Incluso las maestras fueron golpeadas.
A los policías de Hugo Gutiérrez Maldonado les valió madres que les advirtieran que los estaban grabando y que iban a subir las imágenes al Facebook. «Suban todo a las redes sociales, somos policías», decían impunemente los servidores públicos. Este es el gobierno del cambio, el gobierno de Morena que manda a sus candidatos a pedir el voto para seguir siendo lo mismo: Corruptos, ladrones, nepotistas y represores. Ya los maestros le mandaron a decir al gobernador de Morena: «Nos vemos el 6 de junio en las urnas».
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