A estas horas el empresario Alonso Ancira, acusado de lavado de dinero, acusado de haber vendido una planta chatarra de agro nitrogenados a Pemex, cómplice de Emilio Lozoya y de otros empresarios bandidos, ya debe encontrarse en libertad; finalmente llegó a un acuerdo con el gobierno de la Cuarta Transformación. De acuerdo con información periodística, Alonso Ancira negoció con Petróleos Mexicanos su salida, y Pemex aceptó la oferta de más de 216 millones de dólares por la reparación de daño ante la fraudulenta venta de la planta de Agro Nitrogenados.
Es decir, aunque Ancira cometió un delito, y se le acusó de lavado de dinero, sólo con regresar parte de lo robado, con eso obtendrá el perdón y se le dará la libertad. Sólo falta que con esta supuesta reparación del daño Alonso Ancira de Altos Hornos de México termine beneficiando a Emilio Lozoya y el gobierno de López Obrador lo exonere y hasta una disculpa le ofrezca.
Pues así con la Cuarta Transformación, ya se vio que sólo hay que llegarle al precio a este gobierno y se puede obtener el perdón completo de nuestros pecados.
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