En la Plaza Valle, situada en Pachuca, Hidalgo, oficiales descubrieron un bar clandestino que estaba activo y en el cual dejaban entrar a cualquier persona sin cubrebocas. El bar clandestino aparentaba ser la puerta de un refrigerador. A distancia la puerta parecía sólo una figura pintada en la pared, pero de cerca se notaba que en realidad era una puerta real y no nada más eso si no que la puerta daba a una especie de sótano en donde estaba un mesero atendiendo personas.
Cabe señalar que el hallazgo se hizo gracias a una denuncia ciudadana que alertó a las autoridades sobre el bar clandestino, por lo que se les impuso una multa y deberá permanecer cerrado hasta que disminuya el número de contagios de Covid-19. En este lugar no había medidas sanitarias indispensables, como el uso de cubrebocas y distanciamiento social.
Tras la noticia en las redes sociales fueron expuestas las fotografías de los clientes que se encontraban en ese momento ingiriendo bebidas alcohólicas y exponiéndose a un posible contagio. Tanto al bar como al grupo de personas, les nombraron Covidiotas, como si se tratara de una nueva tribu.
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