Joana Marlén Bautista, directora de Administración del Tribunal Superior de Justicia y Humberto Oliverio Hernández, consejero de la Judicatura del Poder Judicial, participaron activamente en el golpe de estado en contra de Sofía Martínez Huerta. En unas conversaciones de chat que se filtraran Humberto Oliverio se comunica con Joana Marlén Bautista, colocada en el puesto de administración por el primo incómodo Eleazar Guerrero. En esa conversación Humberto le dice a Joana que se deben reunir con Juan Javier Gómez Cazarín.
«Ya tenemos que deshacernos de esa anciana los días pasan y sigue ahí como jarrón viejo». La administradora le dice a Humberto que Sofía Martínez Huerta no la deja avanzar en nada y que tienen asuntos pendientes. Humberto le dice: «Es un hecho que ya nos desharemos de ella, por lo menos de esas personas que tienes estorbándonos (sic)». A los pocos días se dio el golpe de estado contra la presidenta del Tribunal.
Ya fuera Sofía, Joana y Humberto, este par de complotistas, ya están quitándose de encima a las personas que supuestamente les estorbaban. En un comunicado subido a la página de Facebook del propio Tribunal Superior de Justicia, se comunica que «con amenazas la directora de Administración, Joana Marlén Bautista, sus colaboradores y el ahora supuesto encargado de seguridad, pretenden obtener la renuncia irrevocable» de las fuentes de trabajo de esos trabajadores que les estorban.
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