Cuando se dio a conocer el asesinato de 43 estudiantes de la escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, el gobierno de Enrique Peña Nieto buscó de inmediato a un culpable para que el escándalo, que ya era internacional, cesara. Fue entonces que inventaron la historia de que en 2014 los estudiantes días antes habían interrumpido un evento del DIF de la esposa del alcalde de Iguala, María de los Ángeles Pineda Villa.
La historia decía que a manera de revancha la señora le pidió a su esposo, José Luis Abarca, que le diera un escarmiento a esos revoltosos, y fue por ello que la orden del alcalde de Iguala fue detener a los estudiantes para entregarlos al grupo criminal “Los Guerreros Unidos”; esa era parte de la historia oficial. El matrimonio Abarca, aunque trató de esconderse, fue hallado y detenido. Los dos están en prisión desde esos años.
Pues este lunes 24 de agosto se informa que un juez otorgó un amparo a María de los Ángeles Pineda Villa. Con este amparo se cancela el auto de formal prisión dictado por otro juez en el año de 2019.
Esto le da la oportunidad a la acusada de «que se lleve a cabo nuevamente la dirigencia atinente a la declaración preparatoria de María de los Ángeles Pineda Villa, en caso de que no existan en la causa penal los nombres y datos de identificación de los testigos colaboradores con claves ‘Mateo y ‘X’, requiera el agente del Ministerio Público de la Federación que consignó la averiguación previa que dio origen el proceso penal».
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