Tal vez no tienen algo mejor que hacer, inaugurar un puente, una carretera, un edificio público o algún programa de reactivación del empleo. El caso es que, en Coahuila, ante la falta de motivos para realizar un acto de gobierno legítimo, las autoridades sanitarias se pusieron a entregar constancias a pacientes dados de alta de covid-19; ¿y eso cómo para qué? El gobernador pretende dar esta explicación: «El que estén aquí es dar testimonio de lo que pasaron y aportar a la sociedad para que tengan los cuidados necesarios y se puedan evitar los contagios masivos, que luego traen otro tipo de consecuencias».
¿Y para eso habría que entregar esas constancias? ¿No sería mejor procurar que los médicos y enfermeras tuvieran el material necesario de protección? ¿No sería mejor dar a los pacientes los insumos médicos necesarios? ¿No sería mejor una campaña permanente en las calles para que las personas eviten contagiarse?
¿No sería mejor que se reconociera la personal médico por el trabajo que han venido realizando? ¿No sería mejor un estímulo económico a esos médicos y enfermeras que arriesgando su vida están salvando las de otros? Pero no, lo más fácil es dar una constancia a los que se curaron de covid.
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