Como floreros ignorados llenos de polvo, así fue la presencia del SNTE y de la CNTE cuando se anunció que la SEP tenía un convenio con las principales televisoras del país para continuar las clases a distancia. El SNTE, para no tratar de pasar desapercibido, hizo un pronunciamiento donde apoyaba tal medida, haciendo ciertas acotaciones sin importancia. Por su parte la CNTE presentó un pliego alternativo. Lo cierto es que estos grupos sindicales fueron ignorados olímpicamente por el Gobierno Federal.
Esta decisión unilateral dejó de lado la opinión de los maestros. El SNTE no supo definir su postura y dejó que se mangoneara la opinión magisterial. No por algo en varios estados del país ya se comienzan a levantar las voces de grupos inconformes que piden respeto a la opinión del magisterio.
Al menos en Veracruz, el Movimiento Magisterial Popular Veracruzano (MMPV) ha señalado que tiene sus reservas para acatar las disposiciones de la SEV en el estado de Veracruz. Lo cierto es que el SNTE debió insistir en que el maestro es insustituible. Un televisor no interactúa, un maestro convence, persuade, enseña y, sobre todo, transforma la actitud del aprendiz.
Comentarios