Este caso debe hacer consciencia en esas personas que sólo piensan en su satisfacción sin entender que con su egoísmo ponen en riesgo a sus seres queridos. En Florida se reporta el caso de un joven de 21 años que decidió desobedecer a sus padres, quienes le dijeron que no fuera a la fiesta a la que estaba invitado. El joven no quiso hacer caso y se fue; la madre ante de que saliera le pidió que al menos tomara las precauciones debidas por causa del coronavirus. Pero tampoco hizo caso de eso el joven, quien se quitó el cubrebocas para comer y tomar con los amigos. Ahí se contagió de coronavirus.
Así, contagiado, regresó a su casa donde contagió a su madre y a sus hermanos, quienes afortunadamente se recuperaron del coronavirus. No así el padre, quien por razones de sus enfermedades se puso muy grave al grado que tuvo que ser intubado.
La madre del joven subió una foto a las redes sociales para pedir que se ore por su esposo: «Ahora mismo realmente necesito que todos en el mundo comiencen a orar por mi John Place. No pido mucho, pero necesito desesperadamente la ayuda de todos para unirnos y rezar mucho todos los días, ya que a John le pusieron un respirador para ayudarlo a descansar y ayudar a que sus pulmones respiren para que pueda luchar y superar este horrible virus que se está apoderando de su cuerpo. Tenemos hijos y necesitamos que vuela». Y todo por el egoísmo de un hijo que quería fiesta.
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