Dicen algunas personas que cuando se está marcado por la mala suerte no hay nada en este mundo que pueda cambiarlo. Sari Salem Wardat, un hombre de 46 años, originario de Jordania, salió en libertad de prisión por motivo del coronavirus. Las autoridades están previniendo el contagio y por esa razón están dejando en libertad a varios reos en distintas prisiones. Sari Salem estaba cumpliendo una condena de ocho meses por portar un arma sin permiso, más de pronto le dijeron que se fuera a su casa para que el coronavirus no se propagara en la cárcel.
Los familiares de Salem Wardat al enterarse de que lo dejarían en libertad, fueron a recogerlo a la prisión llenos de emoción. En el video que ha circulado en redes sociales se ve cuando Salem llega en un carro azul a su domicilio, acompañado de un hombre. La familia de Salem lo espera con mucho entusiasmo, un familiar lo va a encontrar a la puerta del carro y empieza a disparar al aire para demostrar su alegría.
Se sabe que a la familia les gustan las armas y este acontecimiento merecía descargar el arma en el aire. El familiar continúa detonando su arma, de pronto sin darse cuenta, uno de los disparos que tira le da en la cabeza a Salem. Salem cae al suelo inmediatamente pues la bala le atravesó el cráneo. La muerte de Salem se dijo que fue a causa de su mala suerte pues estando en la prisión estaba seguro y el día que salió le quitó la vida un familiar armado. “Estaba muy emocionado de verlo libre pero nunca pensé en asesinarlo”, lamentó el familiar.
He recovered from Covid, returned to his home. The cries of joy rose. Weapons were fired. The patient died with an accident bullet. pic.twitter.com/5Nt4PmUMZo
— No comment (@doktordemirhan) April 17, 2020
No fue una bala perdida, su familiar sin darse cuenta le dispara a la cabeza. Todo el tiempo fue disparando a una metro de el, que torpeza.