Parece que los ataques hacia los enfermeros y enfermeras no cesan y mientras las autoridades gubernamentales no actúen para que esto acabe, los ataques seguirán; con la fase 3 ya en vigor, lamentablemente se esperan muchos más ataques. Francia López, una enfermera de la clínica de Ginecología y Pediatría de la colonia Lindavista, en la alcaldía Gustavo A. Madero, denunció ante un noticiario que un grupo de personas la pateó y la escupió mientras le gritaban infectada, sólo por usar su uniforme de trabajo.
En entrevista, la enfermera dijo que la agresión ocurrió cuando estacionó su auto en la colonia Lindavista en la Ciudad de México. Luego de bajarse de su vehículo, sus agresores, al ver que traía puesto el uniforme, se le abalanzaron y la golpearon a más no poder. Vecinos de la zona al ver esto corrieron a ayudarla y por suerte lograron que los agresores no escaparan.
«Me gritaba ‘infectada’ que, porque yo le había llevado la enfermedad a la puerta de su casa, me golpearon, me patearon, me arrastraron, me escupieron la cara hasta que se cansaron. Estoy muy orgullosa de mi uniforme a pesar de todo porque de él vivo, mi hija depende mí, es triste como en otros países a compañeros les aplauden y aquí nos agreden», dijo Francia López, quien luego de la brutal paliza terminó con dos dedos rotos y arañones en la cara, por lo que recibió siete días de incapacidad, mientras que sus agresores fueron llevado a la fiscalía.
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