Muchas personas siguen creyendo que el coronavirus es sólo un invento del gobierno, muchos dicen que esa enfermedad es algo psicológico, los escépticos afirman que el coronavirus no existe. Jorge Enrique Ochoa Ponce es un señor de 41 años de edad residente de Veracruz. Este señor no creía en el coronavirus, pero un día empezó a enfermarse de fiebre al grado que tuvo que ir al hospital casi arrastrándose sin poder respirar. Cuenta Jorge que los primeros síntomas que tuvo fue temperatura y diarrea, empezó a sentir dolor muscular y dolor en sus articulaciones, pasaron seis días y empezó a toser mucho, cada día tosió más y más, hasta que se le fue insoportable el poder respirar.
Cuando Jorge fue al hospital para saber qué tenía, los doctores le dijeron que posiblemente estaba contagiado de coronavirus, el doctor lo mandó a su casa como sospechoso de Covid-19 pero al siguiente día Jorge regresó porque la fiebre se le había complicado exageradamente, en el hospital lo pusieron en aislamiento. Jorge pensaba en su familia, pues con ellos había convivido cuando se empezó a sentir mal.
Jorge pudo librarse de morir del coronavirus y hoy en día agradece a los doctores que lo ayudaron para que recuperara. Jorge se libró de la muerte, pero cuenta que no quedó del todo bien, pues su equilibrio a veces le falla por lo que tiene que sujetarse para caminar. Jorge manda un mensaje a todas las personas, que el coronavirus sí existe y que sigan las indicaciones del gobierno para que no les pase lo que a él le pasó por escéptico.
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