Fernando Yunes, uno de los alcaldes mejor calificados de acuerdo con las diferentes encuestas que sean presentado, se adelantó incluso al gobierno estatal en cuanto a imponer medidas para beneficio de los habitantes del puerto jarocho. Poco después de aplicar algunas medidas, otros municipios decidieron hacerlo de la misma manera; el de Guadalajara, Monterrey y hasta el de Xalapa. Fernando Yunes suspendió los cortes de agua, tandeos, en el puerto, para que las personas tuvieran asegurado este vital líquido en estos momentos de crisis.
Asimismo, Fernando Yunes implementó beneficios fiscales a los empresarios, quienes dan trabajo a los ciudadanos en esta contingencia. Sin embargo, eso, al secretario de Gobierno, el bien nombrado Bola 8, le parece que estás medidas exhiben un «acento excesivo» (¿?) y abonan «al deterioro de la vida social de nuestras poblaciones».
En realidad, lo que le duele a Éric Cisneros es que en Veracruz alguien le esté poniendo el ejemplo al profe Cuitláhuac García, quien en lugar de estar tomando las medidas adecuadas para que los veracruzanos superemos la pandemia del coronavirus, se pone a dar clases de matemáticas, que ya nos dijeron algunos universitarios que lo siguieron en línea, «qué hueva con el tipo». Afortunadamente Fernando Yunes no cede a la presión y en escueta carta le comunica al secretario de Gobierno que mantendrá las acciones que ha anunciado.
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