Salvo algunas dependencias, la gran mayoría de los burócratas sigue trabajando en Veracruz, sólo se les han dado facilidades a los mayores de 60 años y eso, no en todas las dependencias gubernamentales. Los empresarios han tomado medidas con sus empleados y les han dado facilidades a las personas de la tercera edad que los auxilian como empacadores.
Los ayuntamientos han dado la orden de mantener cerrados los antros y centros de diversión nocturnos. La capital del estado luce desolada, sólo algunos incautos y uno que otro imprudente anda merodeando por una ciudad que ya comenzó en tomar en serio la cuarentena impuesta por el gobierno federal y local.
Debemos ser conscientes que, con la salud, no se juega y debemos aprender la lección de otros países, principalmente de Italia, ya que por no tomar en serio el problema del coronavirus, ahora su población está pagando las consecuencias. Ahora sólo resta que aprovechemos el tiempo con la familia. Es momento de estar unidos.
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