Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. Beneficiarios denunciaron corrupción en la operación en el programa de Proyectos de Desarrollo Territorial (Prodeter) de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpa).
Lo quejosos señalaron que los funcionarios titulares del Prodeter se han beneficiado a sí mismos, mediante contratos apócrifos.
En un oficio, los interesados solicitaron una investigación a fondo por actos de corrupción en la Sedarpa, al imponer proveedores a los productores beneficiarios con la entrega de recursos correspondiente al 2019-2020.
Los funcionarios señalados son: Juan Francisco Rangel Martínez, secretario técnico de la Sedarpa y responsable del programa Prodeter; Víctor Manuel Durán Orozco, responsable y coordinador del programa Prodeter; y Jesús Trani Flores, asistente.
Los quejosos pidieron la Intervención del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, para que se proceda contra quienes están lucrando.
«Por eso votamos por usted, ¿lo recuerda señor gobernador? Porque lo consideramos honesto, estamos hartos de tanta rata que está metida en las dependencias, que no se tome el tiempo de ver quiénes son sus funcionarios y deje todo en manos de personas que ya han estado en puestos públicos y corruptos».
Los funcionarios estatales señalados llegaron al cargo desde agosto de 2019 y, de acuerdo con los quejosos, de ese tiempo a la fecha se ha manejado “a su antojo” el programa Prodeter.
Dicen que Víctor Manuel Durán Orozco se da a la tarea de juntar a los grupos que serían beneficiarios, visitando los municipios que podían participar, involucrando ayuntamientos, despidiendo gente valiosa que no estaba de acuerdo.
El pasado 31 de octubre de 2019, Elizabeth Landa Franco, directora general de Producción Rural Sustentable en zonas prioritarias y Noé Serrano Rivera, director general de Desarrollo Territorial y Organización, a nivel federal, realizaron un oficio donde especificaban que los beneficiarios preservarían los derechos de adquirir bienes con proveedores que ofrecieran las mejores condiciones.
A principios de marzo de 2020, hubo una reunión de representantes de las comisiones de grupos para firmar el convenio con la Sedarpa y los beneficiarios; sin embargo, no pudieron ingresar todos y quienes sí lo hicieron, debían firmar una hoja en blanco, situación que despertó la sospecha de que todo era manipulado.
«No conocemos al proveedor, nunca nos dio cotizaciones, nosotros sí buscamos las nuestras como las pidieron. Ahí está el negocio, obviamente el proveedor que nos imponen pasa una mochada a quien lo impuso», añaden.
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