Luego de que perdieran las elecciones presidenciales el pasado 2018, parece ser que el PRI poco a poco se ha venido desmoronando, pues, al no tener el poder que de alguna manera siempre tenían, sus militantes ante estas circunstancias, prefirió irse con la competencia, dándole la espalda al partido político que en sus mejores momentos le dio todo. Y es que la red de corrupción del expresidente Enrique Peña Nieto y los arrestos de los pesos pesados de la antigua administración, han provocado que el antiguo imperio empiece a caer.
De acuerdo a datos del INE, los militantes del PRI han bajado de una forma drástica, pues luego de su derrota y al ser un cero casi a la izquierda, el 76 por ciento del priismo ha decidido marcharse. Además, luego de que se nombrara a Alejandro Moreno Cárdenas como presidente del Partido Revolucionaria Institucional, las cosas empeoraron, pues a Moreno Cárdenas se le acusa de enriquecimiento ilícito, dándole una mala imagen al partido político.
Con los poco más de 5 millones de seguidores que han dejado de apoyar al partido político PRI, ganar o siquiera intentar hacerlo en las próximas elecciones de 2021 suena bastante difícil, pues, aunque su presidente y los aun militantes del PRI han argumentado que están trabajando para recuperar la confianza de la ciudadanía, datos apuntan que, así como van cayendo, el Partido Revolucionario Institucional, podría perder el poco poder que aún tiene en las manos.
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