Como en cada manifestación feminista, las protestantes, mujeres coloquialmente conocidas como “feminazis”, al exaltarse y caldearse los ánimos, rayan paredes, puertas, personas y todo lo que se les atraviese en su protesta. Para muchos, incluyendo las autoridades y tal vez el gobierno, esto es un acto de rebeldía, pero también de vandalismo. Durante su conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador les mandó un mensaje a las feministas pidiendo por favor que ya no rayen ni pinten paredes y puertas, pues, por parte de su gobierno pacifista no habrá represión hacia ellas, aunque grafiteen, rayen o destruyan monumentos históricos, AMLO no hará nada.
«Les pido a las feministas, con todo respeto, que no nos pinten las puertas, las paredes, que estamos trabajando para que no haya feminicidios, no somos simuladores, no esperen que actuemos como represores, que no nos confundan», expresó el presidente en un tono compasivo y paternal.
Según el presidente, él y su gabinete de seguridad están trabajando para castigar y capturar a aquellas personas que cometan feminicidios, aunque las encuestas y estadísticas digan que cada vez estos crímenes crecen más. Claro, ya sabemos que Andrés Manuel López Obrador y su grupo de trabajo tiene otros datos, pero gracias a las «benditas redes sociales», como él las llama, los feminicidios cada día son más visibles.
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