José Ángel es un alumno de la secundaría Federal Rafael Ramírez de la colonia Cerro Hueco del sur de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Sus compañeros dicen que José es estudioso y aplicado. Este joven todos los días se iba a su escuela con ganas de estudiar y superarse, pero las cosas empezaron a cambiar cuando empezó a sufrir de bullying. Comenta su padre que desde hace tres meses José se veía decaído y preocupado; un día llegó golpeado, con su ojo derecho inflamado. Cuando su padre le preguntó que le había pasado, él le dijo que 8 estudiantes de su escuela lo habían golpeado. José Ángel perdió la vista del ojo derecho luego de sufrir desprendimiento de retina derivado de un fuerte golpe.
El padre de José quiso ir a la escuela para platicar con el director y poner una denuncia, pero no fue recibido porque no hay director, ni subdirector, además la escuela sólo cuenta con 5 profesores en lugar de 30 debido a que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, CNTE, no permite la presencia de los otros docentes. Al padre de José le dijo un maestro que ellos no se hacían responsables porque la agresión había ocurrido fuera del plantel. Señala el joven José que muchas cosas no están bien en esa escuela pues los maestros en vez de poner un alto a la violencia los incitan más a que tengan esa postura de agresividad.
Cabe mencionar que, a finales de enero de este año, en el interior del mismo plantel, se registró la denuncia de una madre de familia luego de que una docena de estudiantes, entre niños y niñas, sufrieran desmayos durante la clase de educación física y de los cuales un menor fue hospitalizado.
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